Arsenio Ribeca pegó el portazo como DT franjeado. “Acá no quieren hacer las cosas bien”. “Desenmascaré cosas que nadie esperaba”
Un día dijo basta. Y se fue. Cansado de no obtener respuestas a sus
pedidos, Arsenio Ribeca tomó la decisión que nadie quería por Villa
Sarita y dejó de ser el entrenador de Guaraní.
“Estoy agotado de que siempre pase lo mismo, me doy cuenta que acá no
quieren hacer las cosas bien, entonces antes de terminar internado por
enfermedades me voy”, manifestó el DT.
Frontal, directo y sin titubear a la hora de exponer sus ideales, el
rosarino dio por terminado su vínculo con el club franjeado, que marcha
como único líder de su grupo en la zona 6 del torneo Argentino B.
“A partir de hoy si los dirigentes no quieren que me vaya antes dirijo
estos dos partidos y hasta luego, pero tienen mi renuncia, porque yo no
tengo contrato, tengo la valija preparada, me da lástima que sea así
porque armé un buen grupo como para ascender”, señaló apesadumbrado.
“Yo desenmascaré cosas que nadie esperaba, vine porque me gustan los
desafíos, y no me voy a casar con nadie”, dijo, y aseguró que “a Guaraní
vengo cuando me llamen, pero no con esta gente manejando el proyecto”.
“Esto es muy simple, yo me voy con la frente alta, me voy por pelear una
justicia, y voy por la calle con la frente alta, me voy trranquilo
porque le di mucho a Guaraní, pero a los directivos no les sirvió de
nada, y no pienso seguir haciéndome mala sangre por un par de personas”,
dijo de manera tajante.
“No me gusta que especulen con los resultados, este es el momento de dar
un paso al costado, estamos perjudicando al club, yo en cinco meses me
di cuenta, Gutiérrez en cuatro años parece que no se dio cuenta de lo
que le está haciendo el club”, sentenció.
La pelea interna
“Yo no tengo dramas con nadie; Gutiérrez es un poeta del
fútbol, pero en mi barrio los llamamos los típicos verseros del fútbol,
que te hacen ver cosas espectaculares donde no las hay”, añadió.
Y prosiguió: “No tengo dramas en hablar con cualquier persona y decir
las cosas como son, simplemente peleo porque no quiero fracasar y quiero
que las cosas sean transparentes; y coincido con Gutiérrez en que la
institución está por encima de todo, después la persona, por eso yo,
para no perjudicar a la institución, doy un paso al costado, ojalá él
haga lo mismo”. “Yo creo que la comisión directa nunca me apoyó, acá
depende todo del gerenciador”, sentenció.
“Yo vivo durmiendo con el enemigo, ellos quizás desean algo que yo no,
yo soy frontal, vine para ascender y me parece que a algunas personas
eso no les gusta, acá hay cuatro personas que manejan todo, yo les toqué
a una de ellas que es importante parece, pero para mí no es
importante”, continuó.
“No sé si la gente lo sabe, pero en estos momentos los jugadores de la
pensión duermen todos en una misma pieza y se mueren de calor, y así te
puedo enumerar millones de cosas como esas”, describió.
“Si tengo algo que agradecer en Posadas es ver al hincha de Guaraní cómo
me trata, siempre me apoyó, pero no quiero fracasar, y el problema lo
tengo dentro de mi casa, y eso no lo puedo permitir, no voy a permitir
que un club al que quiero le pongan cosas en el camino; cuando llegué
vine para ascender, pero me di cuenta que conmigo no quieren ascender,
porque siempre tuve problemas, y la realidad se ve en el equipo, que
perjudica al plantel y a los jugadores”, remarcó.
“A los jugadores no les va a caer bien esta decisión, ellos deben
continuar, necesitan el laburo más que yo, y un triunfo de ellos será un
triunfo mío también”, acotó.