Guaraní dio un mal paso y cayó por 4 a 2 ante Sportivo Belgrano en Villa Sarita. Pese a levantar un 0-2 en el primer tiempo, los dirigidos por Teglia se perdieron en el complemento
Absorber el golpe será difícil, casi tan difícil como jugar en una cancha complicada por el agua. Asimilar una goleada en casa será el nuevo compromiso y en el medio habrá que tener en cuenta que la paciencia empezó a disminuir.
Ayer Guaraní dio una muy mala imagen en Villa Sarita y cayó por 4 a 2 ante Sportivo Belgrano de San Francisco, en el marco de la 10ª fecha de la zona Norte del Argentino A.
Sin juego, y soportando un campo de juego sobrepasado por el agua, Guaraní y Sportivo Belgrano aburrían en la primera parte.
Pasaron 20 minutos y la inquietud por conocer las capacidades de los arqueros seguía en la misma forma que en el inicio. Guaraní evidenció falta de conexión, de juego y poca marca.
La línea de doble 5 que puso Teglia en cancha con Zanabria y Pereyra vio pasar a Francia, enganche visitante, una y otra vez.
Vivo y pensante, Francia se paró siempre en las espaldas de Zanabria y comandó los ataques de la visita.
A los 24’ el 10 fabricó una falta apenas pasando el círculo central y desde allí, de tiro libre, sorprendió a todos en Villa Sarita. Le pegó fuerte y con dirección: Desábato, que ingresó sorpresivamente en lugar de Federico Cosentino, se estiró pero no llegó al impacto en el travesaño, que cayó justo atrás del cuerpo del 1.
Sportivo Belgrano empezó a mover el tanteador en una tarde que hasta allí fue aburrida.
El envión de la visita fue importante y cinco minutos después las cosas se complicarían aún más para Guaraní.
La Franja pagó caro sus ineficiencias y para pagar, otro tiene que ganar. Sportivo Belgrano atacó por la banda derecha y Rivero se animó; probó, Desábato tapó con rebote y en la réplica marcó el 2-0.
Panorama complicado y desde las tribunas empezaron las fuertes críticas a Teglia. Herido y dolido, el DT mandó a la cancha a Pablo Ostrowski y sacó a García Chamut, lesionado.
A los 35’ despertó el local: Barinaga se tiró unos metros para atrás y encontró más asociaciones. Ostrowski, Pereyra, Godoy y Gaviglio formaron parte de la levantada. El despertar tuvo un córner al primer palo por parte de Barinaga y allí estaba Gaviglio para descontar. 1-2 con una definición poco práctica y sin ángulo que a esa altura poco importaba.
Ahora fue para la Franja el envión y sólo tres minutos después Mariano Medrano, que se paró afuera del área rival esperando un rebote, lo encontró. De volea, Guaraní igualó el partido.
La esperanza reinaba y la ilusión de estar en ascenso invadió el estadio franjeado, pero todo se desmoronó cuando el segundo tiempo empezó.
Desábato sufrió la falta de conexión con su última línea y ellos se encargaron de generar las primeras chances para el rival.
A los 6’, Macaronne atacó por la derecha y tiró el centro para el buen ingreso de Martín García. Desábato salió mal y el 3 marcó nuevas diferencias. 3 a 2 para Sportivo.
En desventaja, la última línea se perdió y Francia aprovechó. Guaraní no pudo encontrar la reacción y el 10 recibió solo en tres cuartos de cancha, remató desde afuera de área y puso el 4-2 para la visita a los 12’ del complemento.
Con tiempo para descontar, Guaraní utilizó mucho a quienes saben con la pelota. Entre ellos, Ostrowski siempre la llevó bien y envió los centros desde su lateral derecho, pero Sportivo esta vez fue más vivo y cuidó su ventaja. A fin de cuentas, muchas fueron las oportunidades que tuvieron los dirigidos por Teglia. La poca claridad y los nervios jugaron en contra; el resultado se congeló.
El silencio post derrota graficó el presente poco auspicioso del plantel.
