A Guaraní le costó ante Colegiales, que encontró un golazo y celebró el
triunfo 1-0 como una final. La Franja fue sólo empuje y quedó a dos de
la promoción. Cierra con For Ever
Parece que los pequeños dulces que saborea Guaraní se convierten en
algo de mal gusto rápidamente. Esa pequeña levantada de las dos últimas
fechas había sido el primer acto para que la despedida de la fase
regular del Argentino B sirva para canalizar de otra manera esta
campaña.
Pero ayer la Franja volvió a ser un equipo que se quedó en los amagos y
que cuando debió sortear un vallado muy complicado exhibió cierta anemia
ofensiva. Por eso, la caída 1-0 ante Colegiales en su propia cancha fue
un cachetazo que obliga a replantear las cosas para la última fecha, ya
que nuevamente la promoción comienza a llamar con fuerza.
Y se quedó en intentos Guaraní después de que se bajara el telón de la
parte inicial. Porque si bien fue el que se animó un poco más, tampoco
elaboró el juego necesario o desequilibró en el mano cuando las
circunstancias lo requerían. Tuvo dos ocasiones buenas en los pies de
Andrusyzsyn, pero el rival también dejó en evidencia que por los
laterales las cosas no estaban muy seguras. Y en esa parte inicial, el
lungo Detona y el escurridizo Pereyra obligaron a no dejarle margen, ya
que Colegiales pudo haberse puesto en ventaja. Un remate del propio
Pereyra -controlado por Ponzio en dos tiempos- fue un primer llamado.
Como un también un agarrón de Fernández al mismo delantero dentro del
área y muy evidente.
Precisamente el árbitro Luis Pérez tampoco dejó una buena imagen. Ignoró
esa falta y una entrada muy fuerte de Prono a Pereyra que pareció algo
más que amarilla. Luego, poco hizo cuando el visitante -que estaba en
ventaja- utilizó todas los recursos para enfriar el partido y hacer
correr el reloj.
A pesar de esto, a Guaraní le costó en el mano a mano porque Colegiales
es un equipo que apuesta al roce. Y en ese contexto, los livianitos del
local pudieron gravitar poco y nada.
Las acciones estaban equilibradas hasta lo que intentó ser un avance
local se convirtió en un golazo del visitante. Iban 4' del complemento y
Colegiales la jugó rápido de derecha a izquierda y por ese sector se
filtró Almada, quien no dudó y la puso en el ángulo del sorprendido
Ponzio.
Si las cosas estaban complicadas, ese tanto encendió la llama. Y los
simpatizantes empezaron a pedir entrega. Y, si bien el equipo intentó,
fue Prono el que se llevó el mayor protagonismo por la entrega. Así y
todo, Guaraní debió empatarlo al menos: un cabezazo de Juárez al caño y
otro remate de Alvez que sacudió el palo dejaron a todos atragantados. Y
fue así, la bronca quedó expuesta por esas acciones y Colegiales
celebró con ganas. La Franja quedó a dos puntos de los equipos que hoy
están en promoción -y última en su grupo- y deberá resolver la cuestión
la semana próximo en Chaco.
Opiniones
“Cuando vinimos acá dejamos prestigio, el dolor que sentimos no tiene
palabra. Ninguno (de los jugadores) se guardó nada, pero la gente no
entiende. Somos los principales responsables, las cosas en lo deportivo
no se dieron. Dentro de lo malo hay cosas para rescatar. Con la campaña
desastrosa que hicimos los números están a la vista. La campaña fue
malísima, cada uno se hará responsable”
Augusto Prono
Mediocampista de Guaraní
“Creamos situaciones, ellos se paran bien atrás. Fue un buen año (personal) pero queda el sabor amargo”
Elián Kopp
Lateral-volante de Guaraní