
En un partido que tuvo de todo, raro por donde se lo mire, Guaraní le ganó (le ganaba?) a Brown por 2 a 1, cuando a los 42 minutos de la etapa final en momentos en que debía ejecutarse un penal para la franja, un corte de luz en las torres del estadio, impidió la prosecusión del encuentro y el árbitro Adrián Zabal luego de más de 20 minutos de espera, resolvió la suspensión del mismo.
En última instancia será el Consejo Federal el que defina esta situación, pero habría acuerdo, en el sentido de dar por concluido el encuentro.
Los goles fueron convertidos a los 4 minutos por Daniel Juárez, a los 7 minutos empató Kosachek y desniveló a los 28 minutos Cristian Barinaga.
A los 22 minutos de la etapa final fueron expulsados el defensor Lucas Ramos y el director técnico Daniel Teglia, de Guaraní, en ocasión de una acción sumamente confusa como consecuencia de la sanción de un tiro libre en el borde del área franjeada que derivó en airados reclamos.
Ejecutado (dos veces) el tiro libre se produjo una sensacional atajada de Gonzalo Ponzio que desvió del ángulo superior izquierdo el disparo ejecutado con potencia y precisión de José Defilippi.
Hasta el momento de la expulsión de Ramos, Guaraní justificaba plenamente el triunfo, después el partido se desordenó, Brown atacó, pero no creó peligro porque utilizó mucho el pelotazo que facilitó la tarea defensiva visitante.
Todos los goles fueron logrados en la primera etapa donde Guaraní prevaleció claramente, sobre un rival entusiasta, pero limitado y con escaso poder ofensivo.
La dupla Juárez-Barinaga que ubicó Guaraní en ataque en varias ocasiones con experiencia en el primero y habilidad en el segundo creó situaciones claras para aumentar el marcador, especialmente aprovechando las espaldas de los zagueros centrales, que no escalonaban y se mostraron lentos en el momento de retroceder..
Por las alternativas cambiantes, por el tiro libre y la expulsión de Ramos y especialmente por la forma en que finalizó, el partido puede ser calificado de raro, con final atípico, con un árbitro que "inventó" varias infracciones y cuya actuación no satisfizo a los Guaraní primero y al final tampoco a los Brown, cuando sancionó el penal que no se llegó a ejecutar..
La pena máxima fue sancionada cuando Elián Kopp (que había ingresado minutos antes por Juárez) superó en velocidad a Villalba y cuando ingresaba al área Arce le cometió el penal que la gente de Brown se encontraba protestando cuando se produjo el corte de luz.
Entre las jugadas interesantes cebe mencionar una gran atajada de Mendonca ante un cabezazo a quemarropa de Ramos, ante un corner de García Chamut.
A poco de iniciarse el segundo tiempo se produjo el sonsabido incidente entre Kosachek y la hinchada franjeada, que copó la tribuna popular y parte de la platea.
Por sobre toda otra consideración Guaraní demostró que cuenta con un equipo sólido, con fortaleza anímica que saca a relucir en en los momentos defíciles, como lo demostró en esta ocasión y en la fecha anterior, frente a For Ever, que se definieron con triunfos muy difíciles, significativos e importantes en su marcha en pos de la clasificación.
La derrota de Mandiyú deja a Brown con margen para seguir luchando. Será precisamente el equipo textil a quien Guaraní enfrentará la próxima fecha de Villa Sarita.